Por: Psic. Hilda Mesa
- Una crisis de pánico es un momento de ansiedad intensa o de sentimiento de malestar que aparece muy rápidamente y durante el cual se manifiestan un cierto número de síntomas.
¿Qué es una crisis (ataque) de pánico?
Es un momento intenso de angustia. Como cualquier otro tipo de ansiedad, la crisis de pánico también es una manifestación específica del estrés. Solo un médico está capacitado para determinar si este estrés tiene una causa física o psicológica.
En la mayoría de los casos, en nuestra sociedad, el estrés mental juega un papel relevante, pero algunas enfermedades como lo son el hipertiroidismo o un tiroides demasiado activo pueden también ser la causa.
Esta es una enfermedad relativamente conocida pero que suele confundirse mucho con “posibles enfermedades físicas” por la manifestación de los síntomas. En principio las personas acuden al médico y luego al evaluar y no encontrar nada, son remitidos a psicología.
Esta enfermedad se define por la presencia de crisis recurrentes, no limitadas a ninguna situación o a un conjunto de circunstancias particulares. Estás crisis suelen durar de 10 minutos a máximo 30 minutos.
Los síntomas que presenta la persona son:
- Opresión en el tórax
- Sudoración
- Palpitaciones, ritmo cardíaco acelerado
- Mareo, sentimiento de inestabilidad o de mente vacía, sensación de desfallecimiento
- Sensación de ahogo
- Náuseas
- Sensación de hormigueo y/o adormecimiento, también llamado Parestesia
- Escalofríos
- Miedo a perder el control o morirse
- Asfixia, respiración entrecortada
Las causas de esta enfermedad pueden ser múltiples, en mi opinión una de ellas es que estos ataques de Pánico pueden esconder una falta de confianza que tiene la perdona hacia sus capacidades para afrontar situaciones que le resulten amenazante.
Esta sensación de incapacidad puede basarse en experiencias pasadas que han dudo traumáticas para la persona y que aún no ha podido enfrentar dichas experiencias o superarlas.
Mi mejor recomendación es que si identifican estos síntomas acudan a terapia. NO BUSQUEN CONSEJOS. La salud mental no es juego.
