Morelia, Michoacán.-
Poco más de 40 emprendedoras y emprendedores de varios puntos del estados del país, e incluso Querétaro, la Ciudad de México y el Estado de México, denunciaron haber sido estafados por los organizadores del evento We Woman Trending Bazar, esto en razón de que la expo enfocada en la venta de artículos para mujeres no cumplió con lo comprometido a las en su mayoría microempresarias que participaron.
Y es que las afectadas pagaron entre 2 mil 500 y 8 mil pesos por un stand de 1.80 por 1.50 metros, mismo que nunca se instaló, tampoco un escenario en el que habría rifas y presentaciones que, se esperaba, atrajeran a los morelianos al evento.
La organizadora del evento se presentó con diversos nombres ante las participantes que rentaron un espacio para la expo, sin embargo la mayoría coinciden en señalar que los contratos incumplidos por el equipo de organizadores estaban a cargo de Alejandra Esther L. G., quien promocionó el evento únicamente en un medio local y a quien acusan de haber clonado la página de una revista para embaucar a las emprendedoras.
No hubo stands, tampoco escenario, mucho menos asistentes al evento en donde, contrario a los señalado únicamente, se había rentado el día 21 pero no el 22 de septiembre, sin embargo las gestiones de las participantes ante la sede del evento y autoridades municipales permitieron que se instalaran este domingo, pero gran parte de las emprendedoras ya no se presentaron este domingo ante el fraude del que fueron víctimas.
De acuerdo a las participantes, la renta del salón Multieventos Las Américas costó alrededor de 30 mil pesos, por lo que la mayoría del dinero fue a parar a los bolsillos de los organizadores, además denunciaron que el fraude fue más allá, pues le pidieron un artículo para una supuesta rifa a cada participante, misma que no se realizó.
En lo único que cumplió la parte organizadora es en llevar al evento Rossana Nájera, personaje del medio del espectáculo, pero aún con su presencia el evento no registró afluencia debido a una mala planeación publicitaria y a que, como ahora consideran las participantes, todo se trató de un fraude.
Las asistentes planeaban obtener buenos ingresos por la venta de joyería, bisutería, artículos de belleza, ropa, accesorios, entre otros productos dirigidos al público femenino, sin embargo se fueron prácticamente con las manos vacías y perdiendo más dinero del que invirtieron en lo que consideraron una oportunidad de negocios.
