Gerardo Herrera

Emociones y cohesión social

Columnistas Principal

Por: Gerardo A. Herrera Pérez.

Que importante es seguir construyendo caminos para el fortalecimiento de la familia y la sociedad; que importante crear las condiciones para la salud de los miembros de la sociedad. Desde la inteligencia emocional continuamos desarrollando acciones que permitan a los miembros de una colectividad, el conocimiento, manejo, control, y motivación de sus emociones.

Y es que de poco servirá contar con un cerebro extraordinario tanto en su pensamiento racional, como emocional, si no logramos comprender la empatía, sino logramos leer emociones propias y ajenas. Somos extranjeros viajando en nuestro corazón y nuestra conciencia, sin conectarlos, sin hacerlos dialogar, sin utilizar la sabiduría; debemos aprender a conectar, a gestionar el miedo y también a ser asertivos.En este contexto, fue Uruapan, en donde se llevó a cabo el taller “Manejo emocional y cohesión social”, un binomio que permite fortalecer el trabajo para la prevención de la violencia, procesos educativos y de aprovechamiento para la salud mental.

En un ejercicio reflexivo se avanzó en acciones de inteligencia emocional, como una pieza fundamental para la construcción de la conciencia personal y de la conciencia social; es decir, hablamos de inteligencia emocional cuando somos capaces de reconocer las emociones y su impacto en nosotros y los otros, es decir en todo aquello que nos rodea. 

En el ejercicio del taller, se identificaron cuatro estadios de una inteligencia emocional: la autoconciencia emocional, es la capacidad de comprender lo que sentimos y de estar conectados con nuestros valores y nuestra esencia; la auto-motivación es la habilidad de cada personas de orientar sus capacidades y talentos hacia nuestras metas; la empatía, es la forma de relacionarnos e interaccionar, no solo desde el discurso, sino desde nuestra manera de mover el cuerpo, la voz, las miradas, los gestos, las posturas, las expresiones. Finalmente, las habilidades sociales, mantener relaciones sanas con las demás personas, la comunicación efectiva y asertiva, el manejo de conflictos y resolver diferencias, para disfrutar de nuestras relaciones interpersonales.

El manejo asertivo de las emociones, permite el fortalecimiento de la cohesión social, a partir de recuperar la confianza entre los miembros de la colectividad o de la familia, o familias, pero también a generar la identidad de familia o grupal. Por otro lado, se fortalecen los valores de comunalidad, dejando de lado los valores individuales y de egoísmos que tanto daño hacen a la sociedad, pero además permite la convivencia, la fraternidad y la participación social.

Con la participación de familias, madres, padres, hijos, hermanos, hermanas y en una convivencia social, concluyo el taller con un grito que recupera que las familias puedes ser diversas, que no hay un modelo de familia, que al ser un constructo cultural debemos de disfrutarnos.

De esta manera estructuras social de Uruapan, pero también de la Fundación El Sol, sede México, continúan trabajando en la formación de la familia para continuar trabajando el proyecto de Paz y convivencia social.