Surge un movimiento ciudadano solidario con la situación extrema de violencia y secuestro que se vive en Aguililla, para interceder con una marcha en Morelia por la atención a la población.
La migración ya es un tema latente en el pueblo de Aguililla, la gente ya no quiere vivir allí porque están en una situación complicada, sin servicios, incomunicados con el exterior y con actos de violencia grave, nadie merece vivir así, declaró Karla Velasco, vocera del movimiento “Aguililla merece paz”.
Con una marcha desde el monumento a Lázaro Cárdenas hasta el Palacio de Gobierno por la avenida Madero, en Morelia, busca sensibilizar a las autoridades, medios de comunicación y a los mexicanos en general sobre la situación que desde hace dos años padece Aguililla, por una disputa de territorio protagonizada por cárteles de la droga.
Ayer miércoles, después de una marcha en Aguililla de los pobladores, con mantas y pancartas donde piden la intervención de las autoridades, por la noche se llegó a un acuerdo entre el pueblo y los militares destacamentados en la cabecera municipal, la respuesta al mismo se les dará este jueves a las 6 de la tarde.
Al teniente coronel de la base de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) entregaron un pliego petitorio para que, así como ellos esperan órdenes “de arriba” para actuar, le hagan llegar a “los de arriba” sus necesidades inmediatas para que se rescate a los habitantes del pueblo.
En dicho pliego petitorio piden al gobierno federal que intervenga, ya no con violencia para defenderlos del crimen organizado, sino para rescatarlos de un secuestro general de la población que se ha agudizado en los últimos seis meses.
Declararon no querer ya nada del gobierno estatal, porque “Silvano nunca nos ayudó y preferimos esperar a que se vaya y a ver si el gobernante entrante tiene una mayor sensibilidad política y nos ayuda. Del gobierno federal esperamos que de orden a la Guardia Nacional y a la SEDENA de defendernos y garantizarnos el libre tránsito, los servicios de electricidad y telefonía”.
Este pliego petitorio se plasmó también en una manta en el pueblo, en ella se deja ver que el problema de Aguililla tiene ya más de dos años, tiempo en que el gobierno de Silvano Aureoles no solicitó ayuda, ni ayudó.
Otra manta pide al pelotón de la SEDENA destacamentado en Aguililla que no mientan, porque no los está secuestrando el pueblo, lo único que quieren es que hagan su trabajo.
Las solicitudes a las que el pueblo quiere tener respuesta son las siguientes:
“10 Días sin servicios básicos, 6 años sin banco, 1 año y medio sin carretera libre. Sectores agrícola y ganadero 2 años sin poder vender sus productos. No queremos más muertos en el bloqueo por no poder llegar a tiempo a un hospital. Estamos hartos, exigimos que el gobierno haga su trabajo y queremos que todo el mundo se entere de nuestra situación y nos ayude. No tenemos a dónde irnos y no queremos irnos, ¡huir no es la solución!”.
Por lo que respecta a la migración, hay informes de que por lo menos la tercera parte del pueblo ha huido de Aguililla, unos por la situación de violencia y escases, otros ante la impotencia y falta de respuesta de las autoridades federales y estatales, pero la mayoría no tiene a dónde ir.
El sentir de la población es que ya no darán marcha atrás en la exigencia para que la autoridad tome cartas en el asunto y los defienda, seguirán alzando la voz, en medio de la violencia desatada por dos grupos criminales que se disputan Aguililla como territorio propio.
El pueblo seguirá rodeando a la base militar hasta que llegue la respuesta de las autoridades y la sociedad entienda que necesitan ser rescatados de esta situación.
