Con el tiempo las amenazas pierden credibilidad. Se convierten en una conducta repetitiva y los resultados no siempre son los deseados, desgastan emocionalmente y los problemas no se resuelven, solo alimentan el círculo vicioso donde se encuentra sumergida la relación.
Es importante dejar muy claro los límites y marcar un tiempo definido y preciso de espera. Si ha pasado ese tiempo, la situación es la misma ¿Qué más esperas?
Esto aplica para relaciones tóxicas, infidelidades, maltratos, y falta de compromiso con la relación.
Es cierto qué hay circunstancias que requieren de flexibilidad y paciencia que son cualidades de madurez emocional ante situaciones de conflicto que toda relación pasa eventualmente. Pero pasar la vida bajo los mismos conflictos no es para nada sano y se pierde un tiempo valioso de vida. Por ello, te invito a tomar decisiones oportunas y si es el caso, retírate dignamente.
Hilda Mesa
Psic. Clínica, Psicoterapeuta y Sexóloga