- El documento se puede consultar en la página electrónica de la institución. La intención es que los sindicatos presenten sus observaciones para concretar una propuesta final.
Una primera propuesta para reformar el sistema de jubilaciones de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) se presentó a los medios de comunicación y es de consulta pública a partir de hoy en la página electrónica de la institución.
En un principio, se había programado una actividad en donde todo público pudiera presentar sus dudas y observaciones, pero ante la manifestación de integrantes del Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana (SUEUM), la sede cambió de último minuto y sólo asistieron medios de comunicación.
La propuesta en cuestión ya se hizo llegar a los sindicatos de la institución, indicó el rector de la UMSNH, Raúl Cárdenas Navarro, y no busca en sí abatir el déficit de más de 900 millones de pesos de la institución, pero sí es uno de los puntos que se acordó en el convenio que se firmó en diciembre del año pasado, además de una condicionante que estableció la federación para acceder a recursos extraordinarios este año, lo cual será necesario debido a que en octubre ya no se contará con recursos para hacer frente al mantenimiento de la universidad y el pago de salarios, puesto que ahora está operando con adelantos de participaciones federales.
“En ningún momento queremos imponer, en ningún momento queremos dar madruguetes ni dar albazos. Hacemos una propuesta inicial y la intención es que la discutamos y que consensuemos una propuesta institucional que permita darle viabilidad financiera a la UMSNH”, manifestó Cárdenas Navarro.
En caso de aprobarse esta propuesta, no se haría efectiva inmediatamente sino hasta la firma del contrato colectivo de trabajo del próximo año, precisó el rector.
“Estamos a disposición de las diferentes estructuras sindicales para aclarar e informar y que el proceso se desarrolle de manera transparente. No somos de la idea de hacer imposiciones”, reiteró.
Esto no resolverá el déficit, concedió, pero permitirá acceder a recursos que permitan hacer frente a las prestaciones no reconocidas, así como el bachillerato nicolaita y las casas de estudiante. “Sería ilusiorio pensar que solamente modificando un punto podríamos resolver el déficit financiero de la universidad. El objetivo es cumplir con el compromiso establecido en el convenio para poder acceder a recursos frescos para terminar correctamente el ejercicio fiscal 2019”.
Pedro Mata Vázquez, secretario general de la UMSNH, expresó que la propuesta no se trabajó “en lo oscurito” sino a la luz de los trabajadores y que por ello es pública. El objetivo principal, subrayó, es generar confianza tanto de manera interna como externa.
Expuso que se han llevado a cabo todo el año reuniones de gestión con autoridades federales de educación superior, así como con el coordinador de asesores de Presidencia de la República, Lázaro Cárdenas Batel y que se está buscando el reconocimiento del bachillerato, entre otras cosas.
“Cuando la universidad firmó el convenio estipuló en qué se iba a gastar el dinero que se le asignó, en ese convenio no hay ni un solo peso destinado al pago de jubilaciones y pensiones. No obstante, la UMSNH a través del Consejo Universitario presupuesta el pago a jubilaciones y pensiones”, acotó.
La propuesta
Para los trabajadores ya jubilados y pensionados o quienes cumplen 25 o más años de trabajo, no habría cambios en su sistema. Este sector constituye el 12. 2 por ciento de los trabajadores administrativos en activo, el 13. 38 por ciento de los docentes y cerca de 2 mil 200 trabajadores ya jubilados, de los cuales el 58.36 por ciento son docentes y el 41.64 por ciento son administrativos.
Un segundo bloque lo constituyen los trabajadores con menos de 25 años de servicio, que integran el 86.62 por ciento del personal actual. Para ellos se proponen ligeros cambios en su sistema de jubilación con varias alternativas que se ponen a consideración de los sindicatos.
Finalmente, se considera un tercer sector que estaría compuesto por los trabajadores que ingresen a la institución después de que se haya aprobado este nuevo sistema de jubilaciones.
Dentro de la propuesta, se contempla la creación de un fondo de aportaciones en donde participarían la UMSNH, el Gobierno del Estado y los trabajadores, cuyas aportaciones serían escalonadas a partir de un dos por ciento y hasta alcanzar un 10 por ciento, que es el porcentaje que aportarán las instituciones. Las futuras generaciones aportarían el 10 por ciento desde el principio.
Además de esta variable, explicó Gómez Monge, se contemplan otras cuatro: edad biológica, tiempo laborado, salario regulador, complementariedad de la pensión del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), mismos que amplió uno por uno.
En este caso, la edad biológica para jubilarse sería de 60 años, aunque se presentan dos opciones a los trabajadores, ya sea pedir edad biológica e incrementar los años de trabajo, pero de manera gradual. Es decir, quienes tengan de 20 a 24 años laborando en la institución, tendrían que jubilarse a los 26 años de trabajo, los que tengan de 15 a 19 años, a los 27 y así sucesivamente.
La otra opción es reducir la edad biológica pero incrementar la cantidad de años laborados.
Para las futuras generaciones, continuó Gómez Monge, se buscará la viabilidad a largo plazo y se tomarían en cuenta las mismas cinco variables. A ellos se les pedirían 25 años laborados para jubilarse y una edad biológica de 65 años.
En lo que respecta al salario regulador, al personal con menos de 25 años de servicio se le presentan dos opciones: que el salario con el que se jubilen no sea el último que recibieron, sino un promedio de los cinco últimos años con su plaza definitiva o bien que se promedien los últimos siete años. En ambos casos se entregaría el cien por ciento, pero se trataría de una pensión dinámica, es decir, que se incrementen los montos de acuerdo con las revisiones contractuales. A las futuras generaciones se les otorgaría un 90 por ciento de un promedio del salario durante toda su trayectoria. Los incrementos serían a partir del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INCP).
En el tema de la complementariedad, Gómez Monge explicó que en el IMSS rigen dos leyes, una en donde el organismo se hace responsable de las pensiones y saca un promedio de las últimas 250 semanas de trabajo para fijar el monto del pago. En la segunda, el IMSS no se hace responsable de las pensiones y éstas corresponden a la Afore. La propuesta de la UMSNH es que los profesores que cuenten con la primera ley continúen con pensión y jubilación. Es decir, recibirían un monto por parte de la institución y otra por parte del IMSS. Para los que tengan Afore, la UMSNH garantizaría el 100 por ciento de su pensión y el pago por parte de la institución bancaria sería un ingreso adicional.
Para las generaciones futuras, se propone que los pagos sean complementarios. Es decir, la institución pagaría lo que reste de la pensión del IMSS o Afore para alcanzar el 90 por ciento de su sueldo, aunque con un tope.
No hay plan B
El rector evitó plantear la posibilidad de cuál sería el panorama en caso de que uno delos sindicatos o ninguno accediera a buscar este consenso. “Espero que podamos mantener el ritmo de trabajo que a habíamos empezado con el SUEUM. Trabajamos con su comité ejecutivo, su consejo general, nos quedamos con la intención de establecer una mesa de trabajo y poder alcanzar de manera paralela con el SPUM”.
“El trabajo que hemos hecho con ambos sindicatos es de informar y el llamado va no solamente a las cúpulas sindicales porque finamente quienes vamos a padecer este problema a fin de año somos todos”, agregó Cárdenas Navarro.
Puntualizó que si bien no se tiene una fecha concreta para contar con esta propuesta, se sabe que las convocatorias para acceder a recursos federales se darán a conocer en la segunda mitad del año. Es decir, en cualquier momento, y no se tiene una fecha prevista de cuánto vayan a permanecer abiertas, por lo que sí existe cierta urgencia en el tema.
