Hilda Mesh

Te amo pero no te deseo

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La pasión que va muy de la mano con el deseo evoluciona con el tiempo. 

Al principio de toda relación se puede evidenciar un gran repunte del deseo, el ser amado nos despierta una química muy especial, tanto así que parece que el tiempo compartido no es suficiente. Luego con el tiempo hay un descenso, pasado el enamoramiento, los estudios indican esta etapa tiene un promedio de duración de 2 a 3 años. 

¿Por qué sucede esto? 

Ya se conocen en parte (virtudes y defectos) se pierde algo de novedad y se van incorporando una serie de compromisos, proyectos y expectativas a la relación. 

Esto conlleva que a veces baje la frecuencia de los encuentros sexuales, tal es el caso, de la llamada de unx hijx, el estrés, una pérdida. 

Además, hay que tener en cuenta que la falta de deseo sexual puede tener componentes orgánicos por ejemplo; un desajuste hormonal, diabetes, hipotiroidismo, hipertensión, menopausia. En términos reales y promedio, hay periodos donde la pasión se realza y otros días baja. Además cuando se pasa mucho tiempo sin sexo puede suceder que el cuerpo se acostumbre y deje de pedirlo. 

“Ahora estamos estables; casa, hijxs, nos llevamos bien, nos amamos… y se perdió el deseo” me decía una conocida en días pasados. Además, me comentaba que le hacía falta que su pareja fuera su amante y le despertara toda esa magia de los primeros días. Aquí cabe este dicho; “cuando amarse no es suficiente”. 

Revisemos nuestra definición de AMOR, se puede amar y no desear, es lo que se espera de un amor filial, por ejemplo; amigxs y familiares. En cuanto, al amor de pareja, es necesario el Eros, la pasión, lo carnal. Sin este NECESARIO ingrediente, muchas relaciones a la larga se deterioran. 

Existe un mito que el sexo tiene que ser siempre espontáneo; no tanto en la vorágine de la vida que los dos estén en sintonía es muy difícil, es decir, que los dos tengan ganas al mismo tiempo, el mismo día, puede ser un poco complicado. Por eso, es conveniente programar los encuentros eróticos, siempre procurando salir de lo monótono y rutinario. 

La comunicación es FUNDAMENTAL y buscar ayuda terapéutica de ser necesario. Cerramos este tema de la inhibición del deseo en la pareja. 

Deseo este año tomen los aprendizajes de las experiencias, y el año venidero sea por mucho, mejor. Un abrazo y reiteradas gracias por leerme. 

Hilda Mesa 

Psic. Clínica y Psicoterapeuta 

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