Año y medio y el Congreso sigue cerrado

A pesar de que ya se suavizaron las medidas para prevenir contagios de covid en establecimientos privados y dependencias gubernamentales, el Palacio Legislativo permanece cerrado a los medios de comunicación y el público en general.

La “Casa del Pueblo” lleva un año y medio sin abrir sus puertas a los medios de comunicación, lo que inició como una medida para protegerse del covid, ha obstaculizado el trabajo de los reporteros y de los equipos de trabajo de los mismos diputados, a quienes tampoco se les permite el acceso.

Michoacán y Morelia pasaron del punto máximo de contagios a un grado más moderado y actualmente la entidad se encuentra en el color amarillo del semáforo epidemiológico, lo que ha llevado a las autoridades sanitarias a flexibilizar las medidas sanitarias y permitir un mayor aforo en los establecimientos privados y las dependencias públicas.

El único edificio público que no ha reabierto al público es el Congreso del Estado; sin embargo, el pasado martes durante la primera sesión de la LXXV se permitió el acceso de invitados de los diputados, pero no el de los representantes de los medios de comunicación.

Adriana Hernández Íñiguez, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, dio a conocer que estas personas ingresaron sin que hubiera una autorización o un acuerdo al respecto, ya que los coordinadores parlamentarios ya habían definido que por seguridad propia y de sus trabajadores, se seguiría limitando el acceso:

“No había acuerdo para que entrara nadie, antier firmamos un acuerdo con todos los coordinadores para el acceso tanto del personal de los diputados como del personal del Congreso. No es correcto lo que sucedió ayer, que entrara mucha gente, porque además de que está en peligro la seguridad de los trabajadores, estamos en una pandemia. Ayer el pleno estaba lleno, incluso a ustedes, los medios de comunicación, no se les ha permitido el acceso, pero ayer parece que eso no importó”, expresó.

Si bien las sesiones se transmiten por los canales del Congreso, sólo se enfoca a la Mesa Directiva, por lo que no se puede saber quién es el que está hablando durante la sesión. Tampoco se puede conocer lo que está sucediendo dentro del recinto ni es posible entrevistar a los legisladores.

A esto se suma que los medios de comunicación no tienen acceso a la toma de imágenes y deben reproducir las que les proporciona el área de comunicación social del Congreso, que no siempre son suficientes y no son notificados con tiempo de otras actividades del Legislativo como los foros, entregas de informes y reuniones de comisiones, las cuales a pesar de ser públicas por ley, nunca se transmiten.