El presidente del equipo lleva años en litigios por presunta evasión fiscal que podrían desencadenar en una sanción de cárcel, lo que según el reglamento de afiliación, tendría que derivar en la desafiliación del equipo.
Si el director del Cruz Azul, Guillermo H. Álvarez Cuevas, va a la cárcel, el equipo tendría que quedar desafiliado automáticamente de la Liga MX, ya que así lo especifican los estatutos del Reglamento de Afiliación de la Federación Mexicana de Futbol (FMF).
Desde hace años, Álvarez Cuevas enfrenta cargos por presunto lavado de dinero por un monto de más de mil millones de pesos, además de que desde 2013 declaró ingresos por 56 millones, pero realizó transferencias bancarias por 422 millones de pesos y 34 millones de dólares a Estados Unidos, además de adquirir inmuebles que no fueron reportados.
El artículo 17-G del reglamento establece:
“Si el Dueño y/o los Directivos del Club han incurrido en actos delictivos o de dudosa reputación, a juicio del Comité Ejecutivo, el equipo deberá ser desafiliado”.
De acuerdo con la columna de Javier Tejado Dondé, publicada por El Universal, el panorama no pinta bien para el director del Cruz Azul, ya que su propio hermano se ha convertido en un testigo esencial en el caso.
La salida del Cruz Azul del futbol mexicano podría evitarse si se cambia de directivos al equipo antes de que se dicte sentencia, o bien si se reformara el Reglamento de Afiliación, aunque por lo pronto no se ha anunciado nada de esto.
