Fue el primer debate en el que participó Alfredo Ramírez Bedolla, no se desmarcó de Leonel Godoy, basó sus propuestas en temas federales y destacó su trabajo legislativo.
El segundo debate de candidatos a la gubernatura organizado por el Instituto Electoral de Michoacán fue el primer debate que contó con la participación del candidato de Morena, Alfredo Ramírez Bedolla, ya que cuando se realizó el primero su partido todavía esperaba que se resolviera la situación de Raúl Morón Orozco. Fue recibido con señalamientos de parte de sus contrincantes.
Cristóbal Arias Solís, candidato de Fuerza por México (FxM), señaló que no tendría que estar ahí, ya que además de no haber presentado sus informes de gastos de precampaña, tampoco había registrado ante el Instituto Nacional Electoral (INE) ninguno de los gastos que ha realizado ya como candidato.
Tanto el candidato del partido rosa como Carlos Herrera, insistieron en la relación que existe entre el candidato de Morena y el ex gobernador de Michoacán, Leonel Godoy Rangel, quien es candidato para una diputación federal y quien ha estado presente en varios momentos de la campaña de Alfredo Ramírez. Éste no se desmarcó ni respondió a los señalamientos.
En Michoacán hay una deuda pública que inició con el gobierno de Lázaro Cárdenas Batel y fue creciendo hasta alcanzar los de 60 mil millones de pesos, denunció Arias Solís. En el gobierno de Leonel Godoy, agregó Herrera Tello, el hoy candidato de Morena era funcionario público en la Secretaría de Finanzas y Administración, por lo que lo acusó de haber planeado la deuda con el entonces gobernador.
No conforme con ello, el candidato tripartidista tachó de “gris” la labor de Alfredo Ramírez en el Congreso del Estado, ya que la mayor parte de las iniciativas que presentó no se aprobaron.
En su defensa, Ramírez Bedolla aseguró que su contrincante está ligado con Silvano Aureoles Conejo, ya que fue secretario de gobierno durante su gestión y “mostró su incapacidad para gobernar”, ya que la entidad cayó cuatro puntos en el índice de paz.
Al momento de presentar propuestas, Alfredo Ramírez invirtió buena parte de su tiempo en destacar su trabajo como diputado local, particularmente la creación de la nueva Ley Orgánica Municipal y que se opuso al refinanciamiento de la deuda pública.
Otra parte de su tiempo la empeñó en referirse a Andrés Manuel López Obrador y a ofrecer programas sociales federales para Michoacán si votan por él, como Sembrando Vida, aseguró que logrará que se instalen en la entidad las oficinas del IMSS, lo cual también compete a la federación, y habló incluso de una Guardia Estatal, como equivalente a la Guardia Nacional, pero no detalló en qué consistiría.
Finalmente, Carlos Herrera remató al ironizar que si bien él fue funcionario público durante cerca de cinco años, primero como presidente municipal y luego como secretario de gobierno, Ramírez Bedolla lleva 20 años “mamando de la ubre de gobierno” y aventuró que si tuviera que ganarse la vida de otra manera “se moriría de hambre”.
“20 años hemos caminado al lado de Andrés Manuel López Obrador y nos ha mostrado el camino de la honestidad valiente. Dime con quién andas y te diré quién eres”, fue la defensa del candidato de Morena.
