Hilda Mesh

Dependencia Afectiva: Una situación común en parejas

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Concepto y característica:

Estas relaciones se caracterizan por ser inestables, destructivas y marcadas por un fuerte desequilibrio, donde el/la dependiente se somete, idealiza y magnifica al otrx.

Para el/la dependiente está situación afecta de forma negativa a su autoestima, y a su salud física y/o mental. Pese al malestar y al sufrimiento que la relación les cause se sienten incapaces de dejarla, siendo los intentos nulos o fútiles. 

Tienen intenso miedo a la soledad y pánico a la ruptura, la cual en caso de producirse conduce a la vigencia del síndrome de abstinencia: con intensos deseos de retomar la relación, pese a lo dolorosa que está haya sido, pensamientos obsesivos, síntomas de ansiedad y depresión, los cuales desaparecen de forma inmediata, caso de reanudarse la relación o comenzar una nueva que sustituya la anterior. 

Los dependientes emocionales tienen una necesidad excesiva de afecto y de ser queridxs y tratarán de conseguir este afecto a lo largo de sus diferentes relaciones de pareja. Muestran una clara resistencia a perder la fuente de seguridad y afecto que constituye su pareja. Son frecuentes las distorsiones cognitivas como el autoengaño y la negación de información que le proporciona su entorno. 

Poco a poco estas relaciones tan destructivas se van fortaleciendo, de modo que el/la dependiente le resulta cada vez más difícil salir de ellas. 

Hablemos de 3 grados de vinculación: 

Vinculación afectiva adecuada: Amor sano, consistente en dar y recibir. 

Desvinculación afectiva exagerada (por defecto): La persona es incapaz de establecer lazos con otras personas. Mostrándose fría, distante y hostil. 

Vinculación afectiva exagerada (por exceso): Característico de la dependencia emocional. El vínculo que se establece con la pareja estaría desvirtuado por una excesiva necesidad de afecto, con el fin de compensar sus carencias afectivas. Constituye el polo opuesto de la desvinculación, siendo ambas formas de vinculación patológicas y desadaptativas en las relaciones interpersonales. 

Rasgos del dependiente afectivo 

• Prioridad de la pareja sobre cualquier otra cosa. 

El/La dependiente emocional pone a su relación por encima de todo, incluyéndose a sí mismx, a su trabajo o a sus hijxs en muchos casos. No tiene que haber nada que se interponga entre el/la individux o su pareja, que dificulte el contacto deseado con el/ella. Obviamente, dentro de una normalidad, pero siempre observando esa dinámica, por ejemplo; una persona va dejando poco a poco sus aficiones como el gimnasio o las clases de pintura para estar más tiempo con su compañerx, hasta que prácticamente se convierte en su sombra, igualmente, una madre/padre separadx inicia una nueva relación y deja continuamente a sus hijxs con sus abuelos para quedar toda las veces que pueda con el/la otrx. 

• Voracidad afectiva: deseo de acceso constante.

Para entender este rasgo, es muy importante que nos imaginemos el/la dependiente puede decidir por sí mismx cómo, cuando, y de que forma contacta a su pareja. Suponiendo que esto, si por el dependiente fuera, tendría el mayor roce posible con su pareja mediante todas las formas posibles. 

• Idealización del/a compañerx. 

El/la otrx se convierte con el tiempo en alguien sobrevaloradx, eso si no lo ha sido desde el principio, por tener un perfil determinado de endiosamiento o de lejanía hacia los demás. Será muy difícil que un dependiente emocional se enamore de alguien al que no admire o vea bastante por encima suyo, no desde un punto de vista racional u objetivo (por ejem; que sea mejor profesional o más inteligente), sino en general, como una sensación que el/ella experimenta de estar con alguien más importante o más elevadx y que transmite deseos de estar junto el/ella. 

• Tendencia a la exclusividad en las relaciones. 

En esta en concreto sucede que no es más que una exageración de la normalidad. Es decir, en toda relación hay un deseo de exclusividad en el sentido de que no queremos compartir a nuestra pareja con una tercera persona. Pero no es solo esto lo que sucede en la dependencia emocional, aquí, además, el/la dependiente quiere literalmente a su pareja para el/ella solx: todo lo demás molesta, desde amigxs hasta compañerxs de trabajo, pasando por familiares hasta hijxs.

• Pánico ante el abandono o rechazo de la pareja. 

El/La dependiente emocional idealiza tanto a su compañerx y se somete tanto a él/ella, considerando la relación de pareja como lo más importante de su vida, que le tiene verdadero terror a una ruptura y son personas incapaces de romper una relación y no por descolgados en el plano económico o en cualquier otra forma, sino porque afectivamente lo encuentran devastador. 

Muchxs se preguntan cómo salirse de este “juego” sin sentirse heridxs o culpables. 

Eliminar la dependencia emocional es posible, para ello es unx mismx el que debe tomar la decisión de cambiar para tener una mejor calidad de vida. Las personas que sufren de apego excesivo, no disfrutan de las relaciones, se enganchan en exceso y pierden su individualidad satisfactoria. 

Hay más porcentajes de mujeres con este problema, aunque también hay hombres que lo sufren exactamente igual que cualquier mujer, con la desventaja de que les suele dar más vergüenza acudir a consulta psicológica. Sienten que su hombría está en duda, cuando en realidad nada de eso tiene que ver, una autoestima baja puede acarrear este problema independientemente del genero de la persona. 

4 pasos que pueden ayudarte a salir de esta situación tóxica, pasos para manejar la dependencia emocional: 

  1. Darte cuenta que la relación en que estás es un ciclo vicioso y buscar ayuda psicológica.
  2. Recupera tus viejas amistades y salir con tu familia. 
  3. No tener miedo a la soledad, usarla para tu crecimiento personal e independencia.
  4. Refuerza tu autoestima, cultívala, cambia tu imagen y explótala.

En el momento que decidas romper con esa relación por mucho que duela, ya estás ganando paz, libertad y salud mental, una relación basada en la dependencia es dañina, lacera tu integridad, te hace infeliz, en el amor se vale todo menos el abuso y el sufrimiento y tú tienes las riendas. 

Hilda Mesa 

PSICOTERAPEUTA 

Email: mhmh2882@gmail.com