Los detalles de la detención del presunto feminicida Diego “N” formarán parte de la carpeta de investigación, pero no se pueden dar a conocer al público, explicó Adrián López Solís.
Diego “N” fue detenido en Jalisco en calidad de presunto responsable en cumplimiento a una orden de aprehensión dictada por un juez de control, precisó el fiscal general del estado, Adrián López Solís.
Explicó que no podía dar detalles de las circunstancias de la detención porque el juez de control debe determinar la constitucionalidad en el cumplimiento de la orden de captura.
Sobre la captura únicamente informó que se llevó a cabo por la policía de Jalisco y que hubo colaboración con el fiscal general de esa entidad, Gerardo Octavio Solís Gómez.
La recompensa de un millón de pesos que se había fijado para quien presentara datos sobre el paradero del sospechoso no se cobró, ya que la localización se dio gracias al trabajo de investigación de personal del Ministerio Público y la Fiscalía General del Estado (FGE), que trabajó prácticamente sin descanso en los últimos días, expuso el fiscal.
Por otro lado, consideró que las reacciones de grupos feministas que se manifestaron para exigir que se esclareciera el caso estuvieron plenamente justificadas:
“Indiscutiblemente que por la naturaleza de los acontecimientos están plenamente justificadas las reacciones genuinas de los colectivos y personas defensoras de los derechos humanos en general y de los derechos de la mujer en particular ante quienes la posición institucional de la FGE ha sido y será sobre la base del más absoluto respeto, concentrándonos en el estricto cumplimiento de nuestras responsabilidades”.
Adrián López reflexionó que a la FGE corresponde tanto respetar los principios de presunción de inocencia y debido proceso en favor de los imputados, como el derecho a la verdad, a la justicia y a la reparación del daño de las víctimas.
En esa línea, recordó que aunque se tiene al detenido como presunto responsable, no se han agotado otras líneas de investigación, por lo que habrá que esperar que avance la investigación.
Cabe señalar que en Michoacán la pena por feminicidio va de los 20 a los 50 años de prisión, aunque será hasta que concluyan las investigaciones que se determine si se trató de un feminicidio o de un homicidio doloso.
