Con una mayoría fulminante se armó ayer la nueva Legislatura. Fueron 499 los diputados que rindieron protesta en la sesión constitutiva.
Morelia, Michoacán a 30 de agosto de 2018.- La LXIV Legislatura de la Cámara de Diputados inició con una nueva versión de las “juanitas”, pues ahora se cambiaron de bancada 56 legisladores que llegaron a la curul por el PT y el PES y que decidieron sumarse a Morena.
El cambio, acabó siendo un regalo para el PRI. Los 31 diputados que Morena le quitó al PT (su aliado en la elección presidencial) provocaron que los priistas se convirtieran en la tercera fuerza política en San Lázaro.
Otro desplazado fue el PES, que pasó de tener 56 a 31 diputados, también, fruto de la migración a Morena.
El PRI dejó su lugar como quinta fuerza legislativa y consiguió una vicepresidencia en la Mesa Directiva, que recayó en Dulce María Sauri.
Lejos de molestarse por haber perdido su condición de tercera fuerza en San Lázaro, el petista Óscar González Yañez festinó: “Aquí todo es por acuerdo y queremos generar un ambiente amable, no ser aprovechados con otras bancadas”. Otro de esos acuerdos aludidos por González Yáñez fue permitir que cada uno de los ocho grupos parlamentarios tuviera una secretaría en la Mesa Directiva.
Y hasta ahí llegó la buena onda en San Lázaro, pues el coordinador de Morena, Mario Delgado, aclaró que le interesa presidir la Junta de Coordinación Política, sin importar que su partido ya encabece la Mesa Directiva vía Porfirio Muñoz Ledo.
Sin embargo, la decisión de quién presidirá el órgano en el que se administran los miles de millones de pesos de San Lázaro, fue diferida, pues a Morena le faltan cuatro diputados para presidir la Mesa y la Jucopo.
Fueron 499 los diputados que rindieron protesta en la sesión constitutiva. Roger Aguilar, de Morena, fue el único en no presentarse por estar hospitalizado.
Una sesión que comenzó con 45 minutos de retraso, porque la bancada del PAN se enfrentó por la definición de su vicepresidente en la Mesa Directiva. A Marco Adame, candidato del coordinador Juan Carlos Romero Hicks, le salió competencia: el ex senador Jorge Luis Preciado. Se tuvo que someter a votación las dos propuestas para que Adame Castillo lograra el cargo. Y mientras los panistas peleaban, los priistas intentaban hallarse en un Pleno en el que la mitad de las curules estaban ocupadas por Morena.
Así, mientras Tatiana Clouthier, Horacio Duarte y Mario Delgado posaban abrazados y Sergio Mayer repartía selfies entre sus compañeros diputados, el ex presidente del tricolor, Enrique Ochoa, buscaba integrarse entre sus compañeros.
Jorge Emilio González Martínez (PVEM) por fin arribó, luego de no haberse aparecido siquiera para credencializarse, y platicó con Luis Miranda (PRI), famoso por haber presentado dos credenciales de elector cuando intentó votar en el Edomex.
La fuerza numérica de Morena volvió a retumbar cuando recordaron con quién está su corazón: “Es un honor estar con Obrador”. El PAN intentó hacerles la competencia lanzando un tímido “Justicia en Monterrey”, en demanda de que les regresaran su triunfo en esa alcaldía. Ellos protestaron con pancartas.
Pero Morena no se iba a quedar con las ganas. Acto seguido: sus diputados viraron hacia donde se encontraban los panistas y comenzaron conteo: “1,2,3”, hasta llegar al 43, en memoria de los desaparecidos de Ayotzinapa. Nadie discutió ese grito.
Con información de El Heraldo / Por Nayeli Cortés
