- Criticó la especulación y la desforestación de cerros morelianos por parte de las constructoras habitacionales
El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, en el arranque del plan de reforestación en el estado, criticó la deforestación para construir de proyectos habitacionales para “ricos” en las zonas aledañas a la capital del estado en los últimos años.
“La fórmula no está adecuada, no es correcta. No puede haber un ambiente de vida, saludable y muy bonito a costa de los demás, destruyendo a los otros. Eso no es un mecanismo sustentable”, así lo dijo el gobernador desde la tenencia de Jesús del Monte.
Indicó que el crecimiento desproporcionado de Morelia ha sido gracias a los “especuladores de la tierra” que, según el gobernador, “se hacen llamar empresarios exitosos” y que en un pasado compraron el metro cuadrado “a peso y que en algunas oportunidades se lo echaron y ni lo pagaron, y ahora lo venden a 10 mil pesos”.
Esto lo dijo a propósito de la inauguración del plan de reforestación que busca llegar como meta las 18 mil hectáreas. Infiriendo que parte del problema del mantenimiento de los recursos naturales no es solamente la quema y la tala de algunos productores que buscan el cambio ilegal de suelo sino por estas constructoras especuladoras de proyectos habitaciones.
Explicó que estas constructoras “le quitaron las tierras a los ejidos para hacer sus grandes negocios y a eso le llamamos –entre comillas– ‘desarrollo’”.
Recordó que en el poco tiempo que tiene habitando en Morelia, “recorría esos cerros a caballo y, un buen día, me encontré una barda allí. Se acabó, porque ahora aquí van a vivir los ricos”, haciendo alusión a los desarrollos habitacionales dentro de la tenencia de Jesús del Monte.
“Hay que ponerles el agua, toda el agua para que no sufran y, luego, hay que invertirles del erario público para hacerles buenos caminos”, explicó.
En el mismo tema de la preservación del preciado líquido, explicó que Michoacán es el “campeón del mundo” en producción de aguacate y blueberry pero “el costo es muy alto y el riesgo ambiental es incalculable”.
“Para que se mantenga un aguacate en producción se necesita de muchos árboles de pino y encino para que produzcan agua y suelo”, afirmó.
Indicó que el arranque del programa es porque la situación de la conservación de los recursos naturales y renovables es “preocupante”.
