Luego de que un niño muriera al practicársele un supuesto exorcismo, el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, señaló que estas prácticas no son muy comunes en la Iglesia y que el caso en cuestión no se dio de acuerdo a los lineamientos eclesiásticos.
Morelia, Michoacán a 18 de febrero de 2018.- En los últimos meses la Iglesia católica en Michoacán no ha realizado exorcismos, es una práctica poco común y que para llevarse a cabo debe contar con la anuencia del obispo. En Morelia sólo hay dos sacerdotes acreditados para ello, indicó el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, al ser cuestionado en torno a la muerte de un menor en Apatzingán a quien supuestamente se le practicó un exorcismo.
De acuerdo a información de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), el martes pasado se detuvo a una persona por el delito de homicidio practicado en contra de un niño de nueve años en Apatzingán.
El imputado, Gilberto H., decidió practicar el pasado 2 de febrero un supuesto exorcismo al niño al que le aquejaba un fuerte dolor abdominal, lo que derivó en fractura de cervicales, que llevó a la muerte del menor.
Al respecto, Garfias Merlos expuso que por lo general cuando las personas recurren a la Iglesia para solicitar que se practique un exorcismo, los supuestos afectados por posesión resultan padecer algún tipo de patología mental, por lo que la práctica no es nada frecuente y en la capital del estado solamente los sacerdotes Guadalupe Franco y Miguel Contreras cuentan con la atribución para realizar exorcismos.