Inclusión laboral, atención en los centros de salud pública, castigo a la violencia hacia la comunidad lésbico-gay, son algunas de las tareas pendientes por parte de las instancias gubernamentales para ofrecer a todos los ciudadanos democracia e igualdad.
Dentro del conversatorio “Derechos de personas LGBTI+. Avances y retos en la lucha contra la homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia” organizado por la Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres (Seimujer), representantes de esta comunidad, dialogaron sobre la necesidad de dar continuidad a los logros de la actual administración de gobierno en materia de visibilización de este grupo de personas.
Con la participación de la propia titular de la dependencia, Claudia Elena Padilla Camacho, los representantes de diversos colectivos que han empujado desde la sociedad hacia el gobierno derechos que sólo se han adquirido en Michoacán y la Ciudad de México, se destacó la existencia de un Departamento de Diversidad Sexual dentro de Seimujer como uno de los primeros pasos logrados, además de la legislación que permite el matrimonio entre dos personas del mismo sexo y el cambio de nombre en el acta de nacimiento, documento que facilita el acceso a trabajo y educación.
Sin embargo, estos logros no han permeado en el interior del estado y en especial en las comunidades indígenas, externó Jaime Ferreira Medina, del colectivo “Puki Tejiendo Dignidad”, quien trabaja con mujeres indígenas transgénero o lesbianas, quienes para poder sobrevivir necesitan tomar el rol femenino dentro de su pueblo y sólo fuera de su demarcación pueden comportarse, vestirse y actuar como lo que realmente son, ya que temen por su integridad física de hacer lo contrario.
Profesor de la Universidad Intercultural Indígena, Jaime Ferreira relata su quehacer didáctico y comunitario para la concientización de la libertad de género, el trato digno y apertura social hacia la comunidad LGBTTTI
“Desde las cúpulas partidarias o estructuras de poder la población LGBTTTI+, pensamos que legislar en pro de nosotros significaría para los diputados una amenaza porque si lo anuncian pueden perder votos y eso lo hemos visto en Monterey y Yucatán entidades donde la idiosincrasia es más conservadora, en donde no se habla legislación porque los partidos quedarían vinculados en este tipo de luchas”.
Señaló que hace falta generar espacios donde las personas estén acompañadas a los distintos procesos jurídicos por agresión y la atención en el quehacer público del gobierno. Es necesaria la capacitación de profesores, padres de familia, empresarios y representantes sociales para acompañar desde la infancia a las personas LGBTTTI, para abonar así a un ambiente de igualdad y paz”
Edén Irene Valdivia Moreno, cabeza del Colectivo Red Michoacana de Personas Trans, destacó el que hoy el trámite por cambio de género y nombre en el acta de nacimiento sea gratuito, ya que es la puerta para tener una mejor vida lo cual es un avance, sobre todo cuando la red familiar no ayuda a la persona transgénero.
Se manifestó satisfecha, porque las juventudes transexuales gozarán ahora de mayor estabilidad económica ya que podrán insertarse en los ámbitos laborales y académicos por lo menos en Morelia, ya que en el interior del estado, la cultura de respeto y equidad aún no permea.
Habló del concepto de “turismo de derechos”, como la migración hacia otras entidades de la República de la comunidad transgénero, para recibir atención médica, por ejemplo, que en Michoacán no se brinda en el sector salud
“Como derechohabiente del IMSS acudí al endocrinólogo a consulta y al darse cuenta de que soy transgénero me recomendó darme de baja en la institución y buscarla en la Ciudad de México o en Jalisco, en donde el personal médico sí atiende las necesidades de personas trans, igual ocurre con la dotación de medicamentos para el tratamiento de pacientes con el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida (VIH) a quienes por iniciativa del Congreso de la Unión, se les suspenderá el tratamiento en el sector público a partir del 30 de junio”
La negativa de atención médica, así como el no poder acceder a los servicios de la banca es un problema grave una falta impresionante a los derechos humanos.
Si bien tenemos política pública en documentos y reformas legales, las complicaciones surgen para lograr la no discriminación por edad, raza o discapacidad, por lo que existen muchos pendientes dentro de las políticas públicas, subrayó.
Durante el ejercicio de diálogo, Raúl Martínez Rojas del Colectivo Michoacán es Diversidad, dijo que para que la educación en México sea realmente integral, debería corregir los contenidos para ver qué mensajes de homofobia se están plasmando.
“Por desgracia la Secretaría de Educación hizo una propuesta a la Federación, que hasta el momento no ha retomado por la moralina del gobierno federal. Hablar de niños y niñas excluyendo a la infancia trans, es deficiente. Si se deja sólo a la Seimujer el tema de la sexualidad de las personas y sus derechos, no habrá grandes logros, ya que la inclusión de la comunidad LGBTTTI+ debe ser un tema transversal en los programas de gobierno”.
Externó que no hay acompañamiento de la Fiscalía en los casos de homicidio o agresiones por odio hacia homosexuales
“nos siguen criminalizando y la mayor dificultad es el activismo blanco civilizado en donde lo hacemos desde el escritorio y la capital allí se queda, cuando deberíamos acompañar a las alcaldías en el interior del estado para que permeen las mismas políticas de igualdad sustantiva”.
“En Michoacán, la actual legislatura ha sido la más gris que hemos tenido por años, con la renovación de los integrantes del Congreso Local, tendremos la gran oportunidad de plantear la actualización de legislación para eliminar la discriminación, debemos que corregir esas terapias psicológicas de conversión, como un planteamiento de solución para nosotros, más bien lo que se necesita es la visibilidad de nuestra realidad de vida para que se respeten nuestros derechos y darle a las nuevas generaciones el apoyo necesario”.
Necesitamos evaluar y monitorear, generar indicadores de lo que se ha hecho en Seimujer durante los últimos 6 años, hay muchos candidatos que se nombran activistas de derechos humanos, “ que nos digan en qué le van a entrar, si hay alguien que trabaja en educación dejémolos y veremos lo que pasa en las empresas, en los órganos autónomos”.
No dejemos que se tomen la foto con la banderita de colores, porque seguimos siendo apestados ante el sistema, concluyó, “aprovechemos esta coyuntura política para que nos dejen llegar a la toma de decisiones. Los integrantes de la comunidad LGBTTI+ no sólo pensamos en sexo, hacemos muchas más cosas”.
