Cuando se inicia una relación de pareja parece inconcebible que en algún momento se llegue hacer tal declaración: “NO TE DESEO”. Aunque parezca duro escucharlo e incluso expresarlo es la realidad de muchas relaciones actuales y y es la causa de infinidad de separaciones y también de infidelidades.
Quizá nuestros abuelxs, no llegaron a expresarlo, a pesar que algunos productos de la regresión sexual de la época llegaron a tener poco repertorio sexual y con el tiempo las relaciones se sostenían debido al compromiso y dependencia afectiva, económica y temor al señalamiento social.
La pregunta que suelen hacerme: “¿Es posible recuperar el deseo?”
La respuesta que suelo dar: “DEPENDE”. Ocurre qué hay relaciones que llegan al punto del no retorno, es decir, se ha enfriado tanto el vínculo sexual y afectivo, que cualquier intento de hacer mejoras es tomado con desánimo e incredulidad. Por ese motivo se hace el mínimo esfuerzo, porque antes de iniciar, ya se considera una causa perdida. Por lo general, son casos donde se han hecho “algunos” intentos y todos han sido fallidos. O tal vez, nunca se hizo el intento, sino que todo fue dejado en manos del destino “algún día todo mejorará” y el resultado es que ese día nunca llega y cuando se cae en cuenta, ya todo se encuentra perdido.
Ahora bien, hay relaciones que tienen mayores posibilidades de “recuperación”,son esas relaciones donde se reconoce a tiempo el problema. En estos casos, algunos de los dos hace un llamado de atención y AMBOS se comprometen a realizar los correctivos. Además, el vínculo afectivo aún se mantiene intacto, hay un pleno reconocimiento del amor y lo necesario es reactivar la llama del deseo.
En cualquiera de los casos, es conveniente la ayuda profesional, para la toma de decisiones y mejoramiento de la respuesta sexual en esta o próxima relaciones.
Continuaré abordando el tema en próximas Columnas semanales.
Hilda Mesa
Psic. Clínica y Psicoterapeuta
Facebook: HildaMesh